Mal librados

Una encuesta señala que Colombia es el país más susceptible a sufrir ataques terroristas en todo el mundo.

19 de septiembre de 2003

Si bien ya se cumplieron dos años desde los atentados contra las Torres Gemelas en Nueva York, la amenaza del terrorismo indiscriminado y sorpresivo sigue siendo un tema de gran preocupación entre los empresarios de todo el mundo. Una reciente encuesta elaborada por la firma World Markets Research Centre (WMRC) sostiene que cerca del 75% de los empresarios del planeta considera que el riesgo del terrorismo en sus operaciones es hoy considerablemente mayor que hace cinco años. Un 72% de los entrevistados, entretanto, afirma incluir este riesgo en su proceso de toma de decisiones. Mala noticia para Colombia.

La gráfica muestra el Indice Global de Terrorismo calculado por el WMRC. Colombia ocupa el primer lugar en el ranking de 186 países y es el país que se percibe como el más susceptible a un ataque terrorista en los próximos 12 meses, según el informe. El país no solo está en el primer lugar sino, además, en el nivel de extremo riesgo (entre 85,5 y 100). Solo Israel, que ocupa el segundo lugar del ranking, está en el mismo rango. Estados Unidos, por su parte, ocupa el lugar número 4 dentro del ranking seguido por Filipinas, Afganistán, Indonesia e Iraq.

El índice se construye con base en cinco componentes: motivación, presencia, escala, eficacia y prevención. La motivación considera las razones por las que un país podría ser atacado. La presencia mira si hay grupos terroristas activos allí. La escala determina la vulnerabilidad de un país a ataques frecuentes. La eficacia es la sofisticación de los grupos que atacarían al país y la prevención evalúa la habilidad de un país para detener los ataques terroristas. Cada variable se califica en un rango entre 1 y 10 (en donde 1 es el menor riesgo y 10 el mayor) y se le da un peso proporcional a la importancia que tiene.

La calificación de Colombia es el resultado de su vulnerabilidad frente a ataques de la guerrilla y los paramilitares. El informe considera que aunque el gobierno está haciendo un esfuerzo importante, las soluciones militares y los intentos de una negociación pacífica no han tenido ni se espera que tengan un efecto importante en el corto y mediano plazo. El país está a la espera de una solución definitiva a este problema y del logro de resultados contundentes. Por todo esto, la posibilidad de que llegue capital extranjero seguirá siendo remota.