Enzimas digestivas naturales para tus digestiones en verano: ¿en qué alimentos encontrarlas? 
Consumir fuentes naturales de enzimas digestivas puede ayudar a mejorar tus digestiones este verano. ¿Quieres saber cómo nos benefician y en qué alimentos encontrarlas? ¡Haz clic para saber más!
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Las enzimas digestivas desempeñan un papel fundamental en la descomposición de los alimentos y su correcta digestión. Estas proteínas aceleran las reacciones químicas que convierten los nutrientes en sustancias absorbibles por el tubo digestivo. Después, el metabolismo transforma estas sustancias en energía. 

Si tu cuerpo no produce suficientes enzimas digestivas, no puede digerir bien los alimentos. Los problemas para ir al baño, la hinchazón, los calambres abdominales, la diarrea o la acidez estomacal son, en muchas ocasiones, síntomas de un déficit de enzimas digestivas. 

Sigue leyendo y descubre qué alimentos con enzimas digestivas puedes consumir este verano para combatir muchas de las molestias de nuestro sistema digestivo. 

¿Qué son las enzimas digestivas?

En primer lugar, vamos a aclarar en qué consisten estas enzimas digestivas y su relación con la función gastrointestinal.  

El aparato digestivo se compone de muchos órganos: el tracto gastrointestinal -también llamado tubo digestivo- el hígado, el páncreas y la vesícula biliar. El tubo digestivo consta de una serie de órganos unidos en un tubo largo que va desde la boca hasta el ano.

Estos órganos toman los alimentos y líquidos que ingieres y los descomponen en formas más simples, como proteínas, hidratos de carbono, grasas y vitaminas. A continuación, los nutrientes se transportan a través del intestino delgado hasta el torrente sanguíneo, donde proporcionan energía al organismo. 

aparato digestivo

Las enzimas digestivas son moléculas necesarias para este proceso, ya que ayudan a descomponer nutrientes como las grasas, las proteínas y los carbohidratos en moléculas aún más pequeñas para que puedan ser absorbidas fácilmente. 

Principales enzimas digestivas: 

Las enzimas digestivas se encuentran a lo largo de todo el aparato digestivo: en la saliva, el estómago, el páncreas, el hígado, el intestino…  

Existen tres tipos principales de enzimas digestivas, que actúan sobre diferentes nutrientes: 

  1. Proteasas: actúan sobre las proteínas, transformándose en pequeños péptidos y aminoácidos. 
  1. Lipasas: se encarga de las grasas, separándolas en tres ácidos grasos y una molécula de glicerol.
  1. Amilasas: descomponen los carbohidratos, como el almidón, en azúcares simples. 

En el intestino delgado también se producen enzimas, como la lactasa, la maltasa y la sacarasa.

En definitiva, si el organismo no es capaz de producir suficientes enzimas digestivas, las moléculas de los alimentos no pueden digerirse correctamente y puede provocar trastornos digestivos como la intolerancia a la lactosa. 

Este tipo de intolerancia alimentaria, por ejemplo, se produce cuando el intestino delgado no produce suficiente cantidad de la enzima lactasa, que descompone el azúcar natural de la leche, la lactosa. Si falta lactasa, la lactosa de los productos lácteos que ingieres viaja directamente al colon en lugar de ser absorbida por el organismo. Entonces, se combina con bacterias y provoca molestos síntomas intestinales. 

Por todo ello, consumir alimentos ricos en enzimas digestivas naturales puede ayudar a mejorar la digestión. 

Alimentos con enzimas digestivas

Algunos alimentos, incluidas ciertas frutas como la piña y alimentos fermentados como el kimchi, contienen enzimas digestivas naturales que pueden beneficiar la digestión. 

Es importante tener en cuenta qué comemos y cómo comemos estos alimentos, para un mayor aprovechamiento de estas enzimas. A continuación, repasamos algunos de los alimentos más ricos en enzimas digestivas, ¡que te interesará incorporar a tu dieta veraniega! 

1- Piña: 

La piña es una deliciosa fruta tropical rica en enzimas digestivas. En particular, las piñas contienen un tipo de enzima digestiva llamada bromelina, muy eficaz en la descomposición de las proteínas, así como a su posterior digestión y absorción.  

2- Papaya: 

Las papayas contienen la enzima digestiva papaína, que descompone las proteínas en componentes básicos, incluidos los aminoácidos. Asegúrate de comer papayas maduras y crudas, ya que el calor puede destruir sus enzimas digestivas. 

3- Mango: 

Los mangos son ricos en la enzima digestiva amilasa, que descompone los carbohidratos del almidón (un carbohidrato complejo) en azúcares como la glucosa y la maltosa. Como curiosidad, la amilasa también ayuda a madurar la fruta. 

4- Plátanos: 

Los plátanos contienen amilasas y glucosidasas, dos enzimas que digieren los almidones complejos y los convierten en azúcares de fácil absorción. Son más activas cuando los plátanos empiezan a madurar, por eso los plátanos amarillos son mucho más dulces que los verdes. 

5- Aguacate: 

Los aguacates contienen la enzima digestiva lipasa, que descompone las moléculas de grasa en ácidos grasos más pequeños y glicerol. Aunque la lipasa es producida por el organismo, consumir aguacates puede facilitar la digestión tras una comida rica en grasas. 

6- Kéfir: 

El kéfir es una bebida láctea fermentada que contiene muchas enzimas digestivas, como lipasas, proteasas y lactasas. Estas enzimas descomponen las moléculas de grasa, proteína y lactosa, respectivamente. 

Además, el kéfir es un alimento probiótico esencial para una flora intestinal sana. 

7- Chucrut: 

El chucrut es un tipo de col fermentada que adquiere muchas enzimas digestivas durante el proceso de fermentación. Las propiedades probióticas del chucrut pueden ayudar a aliviar los síntomas digestivos. 

8- Kimchi: 

Al igual que el chucrut, el kimchi es otro plato a base de verduras fermentadas originarias de Corea. Se fermenta con bacterias de la especie Bacillus, que suelen añadir enzimas como proteasas, lipasas y amilasas

9- Jengibre: 

El jengibre contiene principalmente la enzima digestiva zingibaína, que es una proteasa. Puede facilitar la digestión ayudando a que los alimentos se muevan más rápidamente por el tracto digestivo y aumentando la producción de enzimas digestivas del propio organismo. 

10- Miel:

La miel contiene diversas enzimas digestivas, como diastasa, amilasa, invertasa y proteasa. Sólo hay que asegurarse de comprar miel cruda, ya que no está expuesta a altas temperaturas. La miel procesada puede calentarse, lo que destruye sus enzimas digestivas. 

Ahora que ya lo sabes todo sobre alimentos con enzimas digestivas naturales, ¡demuéstranoslo! Te retamos a hacer nuestro test: 

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Bibliografía

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