La ciudad colombiana de Medellín ha pasado en pocos años de ser tristemente conocida por sus altos niveles de violencia y narcotráfico a convertirse en un ejemplo de regeneración urbana a través de un programa de desarrollo basado en la educación y en la cultura. Reconocida en el año 2013 como la ciudad más innovadora del mundo por delante de New York y Tel Aviv. En 2016 se han cumplido diez años de uno de los proyectos más significativos para contribuir a dicho cambio: la construcción de los parques bibliotecas.
Entrevistamos a Luz Estela Peña líder del proyecto de bibliotecas para que nos cuente, de primera mano, sus experiencias al frente de dicho proyecto.
¿Cómo se define a sí misma Luz Estela Peña?
Soy una persona que disfruta lo que hace, que se esfuerza por dejar huella en las personas con las que comparte, soy reservada desde lo personal, desde lo profesional soy apasionada, comprometida y exigente. Doy todo y espero mucho.
¿Cuál ha sido su trayectoria académica y profesional?
Llevo 30 años trabajo por el proyecto bibliotecario de la ciudad. Inicié siendo muy joven a aportar desde el voluntariado a temas de servicios bibliotecarios comunitarios, trabajé antes de graduarme en una biblioteca escolar infantil una experiencia maravillosa que durante 8 años de mi vida me permitió acercarme a los intereses de lectura de los niños, me sumergí en la literatura infantil, el teatro y la música clásica. De allí pase a una biblioteca pública que me permitió entender que la biblioteca es un escenario en el que se potencia la gestión de relaciones, la información se vuelve un puente que comunica con el otro, que en las comunidades existen necesidades pero hay más oportunidades. En la Biblioteca Pública tuve la oportunidad de tender puentes entre la educación y la bibliotecas con proyectos como “el Maestro nos lee”, profundizar lazos entre los adultos mayores y los niños, o los adultos mayores y los jóvenes o los adultos y los adultos mayores con experiencias como “Abuelos Cuentacuentos” o descubrir la importancia de la lectura desde la gestación constatando que un bebé al que le leen desde el vientre es una persona que tiene mayores oportunidades en el mundo. Después de 12 años de experiencias de trabajo con todo tipo de públicos, la vida me presenta la oportunidad de pensar en un proyecto que tiene una proyección que va más allá del barrio o la comuna, que era hora de pensar en la ciudad y más allá de la ciudad, con profunda nostalgia por la relación directa con los usuarios llego a la coordinación del Sistema de Bibliotecas donde hoy llevo 8 años.
¿Qué son los parques bibliotecas?
Son espacios que trascienden el concepto de biblioteca tradicional, son centros culturales donde el corazón es la biblioteca, y que permite tejer relaciones entre los usuarios y la biblioteca, entre las organizaciones y el equipo que trabaja en el parque biblioteca, es un espacio donde la experimentación es la constante donde nada se hace cotidiano, donde se potencia la capacidad de asombrarse con nuevas experiencias que proponen en completa armonía, la biblioteca, el barrio y sus usuarios.
¿De dónde surge la idea de su construcción?
Surge de la necesidad de cerrar la brecha de espacios para el encuentro, en comunidades que habitan barrios con graves problemas sociales, económicos, de hacinamiento. Surge de la idea de pensar que para los más pobres lo mejor, y que allí donde no hay espacio para compartir salvo la calle empinada del barrio, solo queda una alternativa: construir un espacio que dignifique el encuentro intergeneracional, un espacio democrático que te incite a un comportamiento diferente, te haga sentir mejor persona, mejor ciudadano, más solidario…
¿Qué actividades o proyectos llevan a cabo los parques bibliotecas de Medellín?
Hoy el Sistema de Bibliotecas está conformado por 9 parques bibliotecas, 12 bibliotecas de Proximidad y 6 centros de documentación, en ellos se ejecutan más de 600 actividades al año tales como: Pasitos lectores, tertulias literarias, clubes de lectura, abuelos cuenta cuentos, parque al barrio, exposiciones, talleres de robótica, taller de experimentación, talleres de memoria, costureros literarios, picnics literarios, procesos de alfabetización, alfabetización informacional, conversatorios académicos, entre otros…
¿Se puede afirmar sin faltar a la verdad que las bibliotecas han transformado la ciudad de Medellín?
Se puede afirmar que las bibliotecas han contribuido a la transformación de la ciudad, sin relegar la intervención integral de las administraciones de los últimos 20 años, cada una priorizando entre su planes el tema cultural, de lectura y bibliotecas. Sin duda cuando un sociedad está informada tiene mayores posibilidades de reclamar derechos, pero a la vez de cumplir el papel de veedores y hacer las llamadas necesarias para encauzar la inversión social de la ciudad, cuando se acompañan procesos de empoderamiento de las comunidades y reconocen el valor social de las bibliotecas sin duda serán un aliado en la gestión de los temas culturales.
Y a nivel general, ¿en qué situación cree que se encuentran las bibliotecas y el colectivo bibliotecario de su país en la actualidad?
Los desarrollos en mi país son desiguales, no se puede comparar lo que pasa en las ciudades capitales, con lo que pasa en los municipios más distantes, pero hay que reconocer la apuesta del gobierno actual por cerrar la brecha. La acción del gobierno y en especial por los Ministerios de Cultura y de TIC, han llevado a que las bibliotecas estén en la agenda política del país, han permitido que otros organismos se vinculen en los procesos de fortalecimiento de bibliotecas y procesos de lectura. Hoy hay una apuesta por la cobertura en los servicios de internet que sin duda propiciarán mayor desarrollo en estas comunidades; para el caso de las bibliotecas de las ciudades capitales indudablemente el tema del servicio bibliotecario está como escenario garante de los derechos culturales y del libre acceso a la información. Esta apuesta permite que la inversión este en concordancia con la apuesta cultural de las ciudades.
¿Piensa que nuestra profesión está reconocida?
Estoy convencida de que nuestra profesión tiene un reconocimiento, solo que cada vez es más frecuente que la cobertura de servicios bibliotecarios sea atendido por un equipo interdisciplinario que permita diversificar la oferta y que permita trascender el concepto tradicional de biblioteca, también estoy convencida que tenemos un reto por delante, ya no es suficiente que tengamos competencias para gerenciar la información cuando las demandas y las necesidades son tan cambiantes, hoy se requiere profesionales integrales que sean capaces de movilizar procesos culturales donde la biblioteca sea el ente articulador y dinamizador de la comunidad, si no cambiamos el chip nos quedaremos viendo pasar a los demás profesionales con ideas creativas, innovadoras y que se acompasan con las nuevas dinámicas de la biblioteca moderna y del exigente usuario del siglo XXI autónomo y que espera más de lo que ofrece una bibliotecas tradicional.
En noviembre del año pasado visitó Cuenca para exponer su proyecto y conocer la realidad de las bibliotecas de aquí. ¿Cómo calificaría la experiencia? ¿Qué aspectos destacaría de nuestras bibliotecas?
Fue una experiencia maravillosa, es un contraste grande, nos permite reafirmar nuestra apuesta de servicios bibliotecarios y entender dinámicas propias de las regiones, me toco mucho más que de Cuenca de todas las Bibliotecas de Castilla La Mancha la delimitación de funciones de los bibliotecarios. Me sorprendió que no cuenten con gestores de lectura en la plantilla de personal. Para nosotros hoy no se concibe una biblioteca por pequeña que sea sin un gestor de fomento de lectura, lo concebimos como un profesional de tiempo completo quien está orientado el énfasis en los procesos de lectura desde los diferentes servicios. A resaltar el trabajo de Biblioteca Solidaria, creo que en este tipo de servicios nos llevan mucha ventaja.
¿Y cómo imagina el futuro de las bibliotecas? ¿Considera que siguen siendo útiles en la era de internet?
Estoy convencida que mientras nuestras bibliotecas sigan siendo un espacio de encuentro donde se potencian la relaciones en función de las oportunidades y demandas las bibliotecas seguirán vigentes, hoy hay que dar todo el valor a la interacción, a la posibilidad del encuentro y de resignificar los aportes que se pueden compartir con otras comunidades, el encuentro intergeneracional que se facilita desde diferentes servicios en las bibliotecas, las posibilidades de experimentar y asombrarse hacen de la biblioteca un lugar mágico para ello. Tendremos que seguir trabajando.
Al final de la entrevista nos gusta hacer algunas preguntas para conocer los gustos de nuestras invitadas. ¿Nos recomienda un libro?
La mujer justa de Sandor Maraí. Es un autor que te atrapa, es solo dejarse llevar con temas que parecen cotidianos pero que te sumergen en un mar de sentimientos encontrados.
Una canción
Una mirada al cielo de Celia Cruz, tan profunda como su vida.
¿Alguna aplicación móvil que use o haya descubierto recientemente?
No soy muy tecnológica. Las aplicaciones que más uso en redes sociales son facebook y twitter y musicales spotify y youtube.
Para terminar, ¿alguna anécdota, reflexión o idea que nos quiera contar relacionada con las bibliotecas?
Cuando trabaja en la Biblioteca la Floreta en Medellín, tuve una relación muy estrecha con una familia que tenía unos gemelos, por un asunto laboral trasladaron al papá para otra ciudad y perdí la conexión de la familia por tres años, al cabo de los mismos regresaron al mismo barrio, a la misma biblioteca, al llegar los niños que ya estaban en su adolescencia me saludan diciendo hummmmm!! ¡usted lleva aquí toda la vida! ¡cómo hace para no aburrirse leyendo todos los días a los niños!. No había pensado que llevara varios años haciendo lo mismo… bueno así lo percibían mis queridos usuarios. Estaban a punto de entrar a la Universidad y seguían amando la lectura: eso justificaba una vida de dedicación.
Bibliotecas Abiertas 